Aquel científico necesitaba saber qué sucedería si en la máquina del tiempo retrocedía al momento en que sus padres estaban a punto de conocerse e impedía la relación.
John, era un joven científico que estudiaba la máquina del tiempo para intentar hacerle un uso más fácil de ella, un día se despertó por la mañana y desayunó. Cuando terminó, fue al laboratorio y ya estaba ahí su amigo Robert, entonces ya había descubierto una manera de poder viajar con la máquina del tiempo a cualquier momento (hora, minuto, segundo). Hasta entonces solo ponías la fecha y te aparecía en cualquier momento. Robert había pasado toda la noche en vela para conseguirlo. Entonces John le dijo:
-Vete a casa y ya sigo yo con el trabajo, tienes que estar cansado.
-Si, adiós. ¡ah! Te he dejado ahí unos apuntes para lo que tienes que hacer. Adiós.
-Adiós. Le dijo John. El día siguiente John llamó a Robert, para probar al máquina, y a John se le ocurrió la idea de ir al momento en el que se conocieron sus padres.
Cuando llegaron al momento exacto entraron en el bar en el que estaban conociendo sus padres y se sentaron en una mesa.
- Bueno ya has visto como se conocen tus padres, vámonos. Dijo Robert.
-¡No!, quiero ver que pasa si impido que se conozcan. Le respondió John
-¡Que desaparecerás, no habrás nacido si impides que se conozcan, nunca habrías existido!
John le hizo caso a Robert. John ya sabía que sucedería, y le debía una a su amigo Robert. Después de esto, acordaron entre los dos que deberían dejar de investigar la máquina del tiempo, y destruirla.
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